En estos días sensibleros, acabo de otear un artículo sobre la felicidad y la publicidad. Sirva para dos cosas, una, para entender como somos y que esperamos del entorno (aunque lo neguemos a veces), y como la publicidad lo entiende y lo atiende, y otra, para irme al tópico de felicitar unas fiestas que espero que pasen rápido y sin damnificados.