Vamos terminando con la teoría.

Vamos llegando al final de las clases expositivas y para celebrarlo va alguna cosa más para leer. Aquí podéis ver los que es y la función que cumple un slogan. Es un recurso publicitaria frecuente, pero no es algo imprescindible como a veces se piensa. Por otro lado una lectura que propongo en los últimos años sobre neuromarketing. La investigación en el funcionamiento del cerebro es uno de los caminos abiertos que más optimizará la toma de decisiones en productos y en publicidad. Es algo inquietante, pero conocerlo nos ayudará para conocer también sus riesgos.

57 opiniones en “Vamos terminando con la teoría.”

  1. Con este comentario seré más breve que de costumbre, al igual que un eslogan publicitario:
    Los slogans tienen el poder de llegar al público de una forma creativa, perdurable y que marque. Y en todo ello es increíble la «magia» que ejerce sobre nuestros cerebros, la información nos entra hasta de forma inconsciente. Y en todo ello es relevante el gran trabajo que realiza el neuromarketing para conocer nuestro interior y que la publicidad de esa marca o servicio llegue hasta un lugar privilegiado en nuestra mente, la mente del consumidor.

  2. El slogan siempre ha sido uno de los elementos de la publicidad que más me ha llamado la atención, ya que con tres o cuatro palabras la marca ya es capaz de ocupar un lugar en tu memoria durante un largo período de tiempo. Por eso, lo que más me ha sorprendido es que su utilización se haya visto reducida en la última década, al igual que el trabajo fundamental que hace el neuromarketing para saber que elementos estimulan más la mente para así aplicarlos al producto o a la campaña publicitaria.

  3. Primero, comentaré el segundo texto, pues me ha parecido más revelador y creo que puedo aportar algo más significante que no haya sido dicho ya sobre los eslogans. Como muchos han comentado, y creo que no es ningún secreto, la ciencia avanza inexorablemente, día a día, maravillando a unos y aterrando a otros. Partiendo de la base de que todo avance que se haga con el objetivo de mejorar algún aspecto de la sociedad es, en principio, bueno, no debería haber miedo a atreverse a innovar en un campo con el neuromarketing. No estamos hablando de lobotomías ni bombas atómicas cerebrales, sino de investigar rigurosamente aquellos fragmentos de nuestro cerebro que mejor responden a unos estímulos en concreto, los que nos produce la publicidad.

    Dicho esto, me parece un campo interesante, todavía poco explotado, que puede resultar determinante en un futuro próximo. Respecto a los eslogans, me parece obvio que son un tema importante del que hablar en todo lo relativo a las campañas publicitarias. Se nos menciona que están en cierta decadencia, y en parte lo veo normal. No todos tienen por qué ser grandes piezas literarias(«Teruel también existe», por ejemplo, no lo es), pero requieren de una cierta creatividad que ni siempre se cuenta con la capacidad humana necesaria para alcanzar ni siempre se dispone del tiempo suficiente en un mundo que corre cada vez más deprisa, en que la publicidad, con todos sus factores, es consumida y olvidada con la misma facilidad que respirar. Sin embargo, esa es la magia de los buenos eslogans, hacer recordar a la población una determinada marca o anuncio.

    Los hay famosísimos, que se han convertido en iconos de la cultura popular, o incluso en bromas y memes que quedarán para la posteridad. Cosas como el «Yes, we can» de Obama, el «Think Different» de Apple y Steve Jobs o la reciente y cuestionable «Make America Great Again» de Trump son recordadas por la gente, tienen algo, gancho, ingenio, necesarios para una buena publicidad. Me despido con mi favorito, probablemente el más famoso conocido. «Impossible Is Nothing», de Nike. No por su mensaje motivador, uno de tantos, si no por el dueño de la frase. Es un extracto de un monólogo de la biografía más famosa de Ali, que no del propio Ali. Decía, más bien, que lo imposible era una declaración de intenciones, un ideal. Lo imposible es no luchar. La frase cambia.

    Mi nombre es Jorge Riveiro Pose.

  4. Dende sempre fixeime moito nos slogan las das marcas, sempre foi algo que me chamou a atención pola capacidade de xerar recordo que tiñan en min. Precisamente aqueles que lembro dende sempre caracterízanse por ser concisos e directos, 2 ou 3 palabras, normalmente un artigo, un substantivo e un verbo, ou simplemente un substantivo, a palabra plena, o fundamental. Algúns exemplos, casualmente ou non, fabricantes de automóbiles, son: ¿Te gusta conducir? de BMW ou Das Auto, “o coche” de Volkswagen.
    En canto ao texto sobre Neuromarketing, teño que dicir que nada máis ler o título a palabra que se me veu á cabeza inconscientemente foi “manipulación”. A través de técnicas como a resonancia magnética pódese “diseccionar” o cerebro do consumidor e interrogalo . A lectura do texto déixame coa sensación de que o consumidor non é máis ca un ser que toma decisións de xeito inconsciente, impulsivo e irracional; e a estratexia fundamental manipular a súa emotividade.

  5. Me ha parecido muy interesante el texto sobre los eslogans, nunca me había parado a pensar en ello. De nuevo el texto nos refleja el cambio en el sistema de medios, el uso del eslogan está cayendo, porque su medio predilecto era el papel. Otra de las razones de su caída puede ser que es un medio demasiado directo de publicidad, hoy las formas de publicidad son mucho más sutiles, a la gente no le gusta que les digas abiertamente lo que tienen que hacer. Esto se refleja en que antaño se ponía más énfasis en el producto, y el eslogan era mucho más “bruto”y directo, por ejemplo “La Española ,una aceituna como ninguna”. Con el paso del tiempo vamos hacia una publicidad más sutil y personalizada, (como se puede ver en la segunda lectura) y eso también se observa en los eslogans, que cada vez son más centrados en el consumidor (Brand Personality). En este sentido me ha parecido curiosa la forma de acercarse al consumidor que han tenido las marcas durante la crisis, haciendo de la desventaja una oportunidad de parecer más cercanas.
    El artículo sobre neuromarketing ha sido mi preferido de todos los leídos hasta ahora, me inquieta mucho cómo va a cambiar la comunicación en el futuro, ya que veo que ahora está muy anclada al pasado mientras el mundo se mueve muy rápido. Las empresas nunca han tenido tanta información sobre sus potenciales consumidores, la cantidad de datos que dejamos en la web pueden hacer que un ordenador al otro lado del mundo sepa más de nosotros que nuestra madre. Esta doble realidad de estrategias de comunicación muy ancladas al pasado y revolución tecnológica se acabará solventando gracias a los avances en el conocimiento del cerebro. Me ha sorprendido la conclusión de que los anuncios online de los que normalmente pasamos tengan en realidad un efecto de recuerdo. Otro aspecto que me ha sorprendido es el hecho de que podamos hacer que el cerebro olvide cosas sobre las marcas a modo de “reeducación”, eso sería a la vez que útil, peligroso. Una cosa es que una marca como Adolfo Domínguez utilice una estrategia basada en la capacidad de nuestro cerebro de olvidar para pretender vender ropa a un público más joven (por ejemplo). Otra muy distinta sería que una empresa que ha realizado actos deplorables pretenda lavar su cara ante el público (cosa que ya ocurre, pero que podría hacerse más descaradamente).
    Creo que la lectura conjunta de el artículo sobre eslogans y el de neuromarketing es interesante, porque los eslogans forman parte de nuestra memoria explícita, y de la memoria colectiva y para bien , como en el caso de la española, o para regular (“de qué vas, bitter kas?”) , son parte de nuestra vida.
    (Marta Castro González)

  6. Me ha sorprendido de manera especial el artículo sobre el neuromárketing.
    El mundo del márketing y la publicidad cada día me sorprende un poco más. Y lo cierto es que cada vez las empresas y organizaciones utilizan más recursos para poder llegar con éxito a su público objetivo. El neuromárketing parece entonces ser el futuro. Conocer la manera en que funciona el cerebro humano nos podrá resultar útil a muchos niveles en el estudio de mercado, ya que podremos profundizar en las actuaciones de nuestros clientes o socios y captar más rápidamente su atención.
    Considero, por tanto, fundamental que se siga investigando sobre la memoria. Puede que este sea un gran paso que ayude a nuchas empresas a visibilizarse más y mejor.

  7. El eslogan es una de las partes de la publicidad que siempre me ha llamado más la atención, y es que me parece increíble que algo tan sencillo como una frase pueda tener el poder de quedarse en nuestra memoria. Y es que es esa, su brevedad, su principal característica.
    Me han parecido bastante interesantes ambos textos, sobre todo el que habla sobre la evolución y el desarrollo del eslogan. La parte en la que explica que proviene de un grito de guerra («sluagh gairm») con el que se animaba a los guerreros me parece algo muy curioso, y me parece que el nombre también está muy bien escogido.
    Tras leer este artículo he estado buscando ejemplos de slogans famosos y aquí dejo alguno de los que más me han gustado: «Vuelve a casa por Navidad» de El Almendro, «Rexona no te abandona» y «Redbull te da alas».
    En cuanto al documento del neuromarketing me parece algo muy positivo el hecho de que se estén realizando investigaciones para descubrir el funcionamiento de nuestra memoria, ya que gracias a esto se conseguirá saber cómo llegar a un mayor público y conseguir las respuestas esperadas. Como bien dicen el texto, esto es solo el principio.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

A %d blogueros les gusta esto: