56 opiniones en “De como presentar, y no morir ni matar en el intento.”

  1. Existen diferentes estudios sobre el tiempo que debe durar una presentación en relación a la atención de los oyentes para que ésta resulte satisfactoria. En 1976, Johnstone & Percival establecieron entre 10 y 18 minutos el tiempo que una persona podría estar atenta de manera ininterrumpida y, más tarde, en 1995, Burns amplió esta afirmación diciendo lo que probablemente a todos nos suena de que el nivel de atención más alto se concentra en los primeros 5 minutos y en los últimos 5, y que a partir del 20 la atención cae en picado.
    Una presentación puede ser la tarea más sencilla del mundo o quizás la parte más importante del trabajo que estés realizando, en la que se da una imagen al público al que le estés vendiendo algo, a tu jefe para convencerlo de tu idea o a tu profesor; puede que los datos y conocimientos que tengas sobre el tema en cuestión sean excepcionales pero no valen de nada si no sabes presentarlos.
    Ambas presentaciones te dan consejos que, en el momento de leerlos, son completamente obvios pero que nunca te paras a analizar. Detalles como utilizar colores contrastados para que la idea llame más la atención o que, ante la duda, siempre es mejor quedarse cortos. En la primera presentación ilustra en tres diapositivas lo que no debes hacer, y me parece una escenificación muy interesante. En la segunda me parece de gran utilidad la regla 10/20/30 (10 diapositivas, 20 minutos y 30 pt en la tipografía).

  2. Tras la lectura de ambos documentos, he reforzado mis ideas y opiniones acerca de la importancia de saber expresar y comunicar una idea de una forma amena, breve y clara.
    Todos/as estamos acostumbrados a las viejas, arcaicas y desfasadas formas en las que nuestros/as profesores/as comunican sus conocimientos con la intención de que nos queden. Pero estos/as profesionales (afortunadamente no todos/as) olvidan que comunicar no es sinónimo de «escupir» datos y dejan atrás, ya se por falta de conocimientos o pasotismo, los métodos correctos de transmitir aprendizajes que lleguen de manera significativa a sus oyentes.
    Es importante saber expresarse un público, que las presentaciones que se realicen para ello sean dinámicas, se alejen de lo aburrido y sean capaces de captar la atención de quien allí se encuentra escuchando y observando. Tampoco se trata de hacer presentaciones eternas (dicen que menos es más) pero sí que consigan captar la atención de los/as oyentes durante el mayor tiempo que ésta dure (importante: no aburrir aunque no siempre llueva al gusto de todos/as).
    Por todo ello, creo que lo que se nos aporta con estos dos documentos, que aconsejan y dan pautas sobre la forma más correcta de exponer y presentar, es de gran utilidad para que todo el mundo tenga presente a la hora de realizar algo así. Y es que muchas veces el peso de las exposiciones y presentaciones no recae sobre el qué sino sobre el cómo se hace.

  3. Exponer, qué tema más espinoso. Generalmente, se tienen muchos nervios a la hora de hablar en público. Unas personas saben lidiar con ellos mejor o peor y, con la práctica, se suele llegar a tener un buen nivel.
    En una exposición, como en un anuncio, nuestro objetivo es que la gente se quede con nuestro mensaje, independientemente de lo que digamos. Si lo logramos, podemos colgarnos una medalla. Para eso, como dije antes, la práctica es importante, ya que así vamos perfeccionando el discurso y la puesta en escena.
    Me gustaría recordar una cosa que dijo en clase: prohibido el Comic Sans. En mi opinión, usar alguna vez esa fuente de forma casi cómica puede ayudar por lo poco que gusta y se utiliza. Podemos usarla para romper la monotonía y hacer más amena la presentación.
    Asi que, para acabar, una buena exposición debe prepararse, mejorarse y conseguir romper la monotonía de la misma en las partes fundamentales. De esta manera, el público recordará lo dicho al levantarse.

  4. El otro día leí una noticia (no se si fake o no) de que un país quería prohibir el Power Point… y por una parte lo entiendo. No es el formato en sí, es lo mal que lo usa la gente, y he de admitir que yo lo he usado mal cientos de veces y que soy la típica persona que se enrolla muchísimo hablando. Como en casi todo hay que tener coherencia y conocerse a uno mismo, si eres una persona que se enrolla mucho, una buena presentación bien estructurada te puede ayudar. Me gustan algunos de los consejos, como divertirse y ser lo más cercanos posibles (adecuándose al contexto, claro). Es difícil llamar la atención de la gente, pero tampoco podemos hacer algo demasiado fuera de lo común y hacer que el público se sienta incómodo, hay que encontrar un término medio. Creo que no saber hablar en público es un problema generalizado de este país, y su raíz está en la educación (de primaria a universitaria), sólo hace falta entrar en cualquier facultad y ver cómo los profesores maltratan este formato a golpe de «tochos», colores horrendos y demás florituras. Conclusión: O cambiamos la educación, o matemos el Power Point.
    P.D: He usado Comic Sans en cientos de presentaciones en el instituto, y tampoco es tan horrendo.

  5. Desde que somos pequeños nos hemos tenido que ver las caras muy a menudo con las exposiciones en público y a día de hoy y a pesar de tantos años realizándolas, seguimos cometiendo errores.
    El error más común de todos es querer soltar toda la información que tenemos, cuando lo que tendríamos que hacer es transmitir la información justa y necesaria para que nuestro mensaje se entienda y le llegue a la gente. Dar demasiada información no es solo innecesario, sino que puede llegar a convertir nuestra presentación en algo eterno y cansino, lo que hará que la gente deje de escuchar y no conseguiremos nada. Como bien se dice en ambos documentos, menos es más.
    Lo que tenemos que conseguir para que la gente se quede con lo que estamos diciendo es captar su atención. Ser claro, conciso y breve es lo que tenemos que ser para hacerlo. Además tenemos que creernos lo que estamos diciendo. Si decimos las cosas como si estuviéramos leyendo un prospecto de champú la presentación se va a convertir en algo monótono.Y ya para acabar me gustaría recordar que todo se hace mucho mejor con la práctica, así que cuanto más lo practiquemos, mejor saldrá.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

A %d blogueros les gusta esto: